11 noviembre 2009

Pa One pero de one // Que felicidad!!!

Ayer, 10 de noviembre de 2009, a las 10:00 a.m, confirmaron la tremebunda noticia de que Metallica, la banda que me enlistó con sus melodías hipnóticas en las huestes del metal, tocará por segunda vez en Colombia. Jueputa!!! no me cabe la felicidad en el cuerpo.

Esta buena nueva me remonta obligatoriamente 14 años atrás, cuando me amarré en los pies todo el peso metalero del álbum negro y me lancé hasta el fondo del rock n' roll, para no correr el riesgo de salir. Por aquella época me tocaba velar las melodías de mi banda favorita desde la puerta de Planet Rock en Palmira o Halley Video Bar en Cali, antros a los que no me dejaron entrar hasta que me compré una cédula falsa. Así que, en compañía de mi primo, me tocaba meterme a Shooters, un bar gay en la sexta al frente del Dancali, donde nos dejaban entrar y proyectaban cada vez que se nos antojaba los videos de One y The Unforgiven. (El fin de semana pasado mi primo me dijo que Aventura, la maricada esa de bachata, era para él como Black Sabbath para mí)

Fueron estos videos los que alimentaron mi ilusión de ser un mechudo, cuando aún estudiaba en un colegio militar y no tenía ni siquiera boso. Tuve que esperar un tiempo, pero hoy la cabellera me llega más abajo de los hombros. Estos manes me criaron, sin lugar a dudas. Quería ser como ellos, alcohólico y todo.



Las música de los cuatro jinetes negros ha sido la banda sonora de mi vida y, aunque obviamente con el tiempo mis oídos exigieron nuevas y más refinadas melodías, nunca pero nunca abandoné mi Metallica del alma.

Mientras mis familiares, amigos y compañeros de colegio se dejaron abofetear por modas culas de las que ya no queda nada como los Back's Street Boys, la champeta, el chis pum y el reggaeton (a esta todavía le queda un tiempito), yo seguía fiel a mis héroes, diccionario en mano, aprendiendome una a una sus canciones, guardando hasta el último centavo de la lonchera para comprarme sus discos y sus camisetas, y grabando especiales de la radio para poder escucharlos en un walkman gigantesco que tenía y repetirlos con mi propia vos a todo volúmen por los altoparlantes de la emisora de mi colegio.

Seguiré actualizandolos a cerca de las novedades del concierto y, si acaso alguien lo pide, puedo profundicçzar en detalles e historias al rededor de semejante banda. Seguramente, como hice con conciertos como Iron Maiden, Judas Priest, Motorhead, Heaven & Hell y Barón Rojo, lo cubriré para el periódico. Pero esta vez trataré de entrevistar a alguno de estos monstruos del metal. Les estaré avisando como me va al respecto.

Por ahora les dejo la cuenta regresiva y esta última imágen que tenía reservada para otra entrada pero que no me aguanto las ganas de publicar ya mismo.

Ah, por si no se ha enterado, o si es uno de los lectores extranjeros y quiere saber por simple curiosidad, las boletas salen a la venta elpróximo martes, 17 de noviembre, a las 10:00 am. Las localidades se llaman ONE, The Unforgiven y Enter Sandman; y tienen el no módico valor de Us$ 175, Us$ 120 y Us$ 60.

Si, se que es mucha plata, y sé también que usted puede ser uno de los que me tacha de loco sin dudarlo por gastarme tanto billete en este o cualquier otro concierto (acá en Colombia el viejo truco, para no reconocer que se es un güevón y un incapáz para ir a ver las bandas que le gustan, es decir que ya están viejos, que cambiaron la formación y que si hubieran venido en la buena época sin duda irían).

Antes de tan sólo pensar en aquella desfachatés, recuerde el nombre del blog que está leyendo, eso resolverá de inmediato su duda.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo no voy a metallica, estoy desempleado y sólo tengo para los pasajes de mio y los 3 bananos que me como despues del almuerzo, si entrevistas a hetfield, dile que muchos saludos y que mi dios lo bendiga